¿Qué es el titanio? El titanio (Ti) es un metal que se incluye en muchas aleaciones en todo, desde equipos espaciales hasta la fabricación de joyas. Se cuenta como el noveno elemento más común. El titanio fue descubierto por primera vez en 1791 por el químico británico William Gregor, pero no recibió su nombre hasta unos años más tarde por el químico alemán MH Klaproth.
Así se utiliza el titanio
Como se mencionó, el titanio se utiliza en una variedad de aplicaciones debido a sus propiedades robustas y resistentes a la corrosión. Es extremadamente resistente y duradero, lo que lo hace ideal para su uso en diversos contextos donde el equipo debe soportar un manejo brusco. Además, el titanio es biocompatible, lo que lo hace popular en la tecnología médica, como por ejemplo para implantes y prótesis.
Uso del titanio también en joyería.
Como se mencionó, el titanio ha encontrado el lugar que le corresponde en la industria de la joyería. Debido a que brinda un acabado agradable y un brillo hermoso, es una alternativa más económica a los metales más tradicionales como el oro y la plata. Las joyas hechas de titanio son ligeras y cómodas de llevar y, al mismo tiempo, adecuadas tanto para hombres como para mujeres.
La capacidad de crear diferentes colores en joyería de titanio.
La capacidad de anodizar titanio como tratamiento superficial también brinda la oportunidad de crear joyas más personalizadas. El anodizado puede crear una gran cantidad de colores diferentes sin la necesidad de utilizar tintes peligrosos que pueden provocar reacciones alérgicas . Esto hace que el titanio sea una buena opción, por ejemplo, cuando se desea crear joyas únicas. De hecho, muchas personas también eligen el titanio en sus anillos de compromiso o de boda.
Un material hipoalergénico
El titanio es hipoalergénico y rara vez causa irritación de la piel o reacciones alérgicas. Su resistencia a los rayones y la abrasión significa que las joyas de titanio durarán mucho tiempo en su colección de joyas sin que tenga que darles mucho mantenimiento. El único mantenimiento que en ocasiones puede ser necesario es limpiar con un poco de agua y jabón y pulir. Vale la pena mencionar que el color del titanio puede desvanecerse con el tiempo, pero la decoloración no es dañina.